Cuatro alpinistas que llevaban aislados desde el sábado en el macizo del Mont Blanc fueron encontrados muertos el martes, informó el Pelotón de Gendarmería de Alta Montaña de Chamonix.
Dos alpinistas coreanos y un par de italianos, atrapados durante tres días por el mal tiempo cerca de la cima, el pico más alto de los Alpes franceses, fueron encontrados el martes “muertos de agotamiento”, según la Prefectura del Departamento de Alta Saboya.
Las víctimas formaban parte de dos de las tres diferentes cordadas ─grupo de dos o más escaladores unidos por una cuerda mientras ascienden─ sorprendidas ese día por un repentino empeoramiento del tiempo en la zona.
Una cordada con dos surcoreanos pudo ser rescatada el domingo en helicóptero en condiciones muy complicadas. Desde entonces, el Pelotón de Gendarmería intentó rescatar a las otras dos cordadas, que estaban muy próximas.
Ante la imposibilidad de llegar en helicóptero, se intentó un rescate por tierra, pero al no tener las coordinadas exactas de su posición la operación se suspendió por el excesivo riesgo.
La mejoría del clima, permitió el martes un sobrevuelo y los cuatro alpinistas fueron encontrados muertos, unos 100 metros por debajo de la cumbre del Mont Blanc (que tiene cuatro mil 805 metros de altura), añadió un miembro de los rescatistas de Chamonis.
Los cuerpos fueron evacuados por dos helicópteros. Las muertes se produjeron con toda probabilidad por “hipotermia” después de que los alpinistas llevaran varios días aislados en condiciones extremadamente difíciles.
Las cuatro muertes elevan a 10 el número de alpinistas fallecidos este verano en el Mont Blanc, además de otros dos desparecidos y también previsiblemente muertos. La mayoría de esas muertes ocurrieron por desprendimientos de nieve y placas de hielo.
Entre los fallecidos hay dos españoles, dos guipuzcoanos de 26 y 27 años que murieron el 22 de agosto mientras descendían de una de las cimas del macizo, la Du Tacul, de cuatro mil 428 metros.
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Según los expertos, el aumento en los últimos años de accidentes en el Mont Blanc es por el derretimiento del permafrost (terreno que lleva mucho congelado), acelerado por el calentamiento global, contribuye al aumento de desprendimientos y caída de bloques de hielo.