En rueda de prensa, María Araujo agregó que tomó dicha decisión luego que el viernes pasado fuera baleado su domicilio y este domingo fuera también amenazada en una manta colgada en la avenida 65, en las inmediaciones del Coppel.

Recalcó, que después de estos hechos, confía en que las autoridades den con los responsables de los ataques contra su persona y contra las unidades que han sido quemadas y baleadas durante estas últimas semanas.

En ese sentido, detalló que actualmente se ha abierto una carpeta de investigación con el folio “FGE-QUINTANAROO- COZUMEL-342022”, por lo que exigió al gobernador del estado, Carlos Joaquín González, y al fiscal general Óscar Montes de Oca, para que den los resultados esperados sobre estos casos.

Asimismo, solicitó que se activen los mecanismos de protección hacia su persona y su familia, pues, dijo, “siente vulnerada su seguridad”.

Cabe mencionar que esta renuncia y la suspensión del servicio se dan semanas después que directivos del Sindicato de Taxistas de Cozumel en rueda de prensa dieran un ultimátum a las autoridades municipales y estatales para que apliquen la ley contra el servicio que brindaban los mototaxis, a quienes señalaban de operar de forma ilegal.

En ese contexto, advirtieron que, de lo contrario, ellos no iban a poder detener las represalias que podrían ejercer sus agremiados contra estas unidades. Varios de los presentes incluso insinuaron que se llegaría a la violencia, la que estaría justificada al tratarse de la defensa de su trabajo.

Luego que el domicilio de la ahora ex dirigente de los mototaxistas fuera baleado, y que otro mototaxista fuera golpeado y encerrado en un mototaxi que fue encendido en llamas, este sindicato sacó un comunicado deslindándose de los hechos.