Sin ocultarlo y a la vista de todos, volvió la explotación de monos en la Quinta Avenida de Playa del Carmen. Se trata de una práctica que se realiza desde al menos hace unos 20 años, sin embargo se había frenado gracias al rechazo y protestas de activistas. Inclusive en lugares como la plaza Paseos del Carmen, se retiró a las personas que hacían esto.
Si bien en algunos puntos de la arteria turística más importante de la ciudad como lo es Animalandia, propiedad de Félix Sandoval, comercializan fotografías de animales exóticos como jaguares y tigres con turistas, la explotación de monos se había erradicado.
Sin embargo este viernes se pudo apreciar de nueva cuenta a un par de personas con lo que parece ser un mono ardilla, amarrado con una correa y siendo ofrecido para que turistas lo manipulen y se tomen fotografías con él.
Se trata de una actividad que le genera estrés al animal. Esta especie está en riesgo de extinción y animalistas han denunciado que son dopados para que tengan un comportamiento tranquilo con las vacacionistas.