De nueva cuenta la desarrolladora de viviendas ARA otorga viviendas con diversos vicios ocultos y ahora no se quiere responsabilizar, ni arreglar los desperfectos, lo que llevó a que un grupo de afectados protestaran fuera de sus oficinas de ventas este lunes.
Hasta les cerraron las puertas de las oficinas
Lo más grave, es que ni siquiera los atendieron y hasta las puertas les cerraron con candado para impedir su ingreso por lo que, cansados de esta situación piden a las autoridades su intervención.
Algunos de ellos, como el señor Enrique Yañez, desconocían que la empresa constantemente es señalada por quienes adquieren un hogar y se llevan la sorpresa de que no es lo que les prometieron.
“No sabía de eso, pero si hubiera sabido, no hubiera pensado en comprar y ahora tengo el problema, que no me dan una solución y no me hacen caso y ARA hace mal al no garantizar”, lamentó.
Diversos desperfectos
Fue por la mañana cuando el grupo de aproximadamente 12 vecinos se presentó en las oficinas ubicadas en Palmas 1. Además de los vicios ocultos que presentan sus viviendas, las áreas comunes también tienen desperfectos.
Entre estos, la albercas que no cuentan con un buen sistema de limpieza y ya no se pueden utilizar. Tampoco tienen alumbrado público porque la empresa ARA adeuda a la Comisión Federal de Electricidad(CFE) una enorme cantidad. Y el colmo, ni siquiera tienen un buen sistema de drenaje pues cada que llueve se desbordan las aguas negras en pleno acceso sus condominios.
Se trata del fraccionamiento Paseos de Xcacel, que entregó sus primeras viviendas hace dos años y medio. os primeros ocupantes, desde entonces pelean con ARA para que les soluciones todos los problemas y a la fecha no hay respuesta. Los últimos en adquirir un hogar, no quieren que pase tanto tiempo y esperan se les dé una solución inmediata que en su caso, ya tardó unos cinco meses.
A esto se suma, que por fallas en la red de drenaje que tampoco han reparado, los recibos de Aguakan llegan exorbitantes, como acusó otra más.
Mientras daban la rueda de prensa, personal de la desarrolladora se asomaba por las cortinas, tratando de tomar fotos de los quejosos y los representantes de los medios.
“Firmamos contrato con garantías que no se han cumplido y se niegan ahora a atenderos, en ARA México dicen que nos van atender cuando tengan empleados, pero bien que siguieron construyendo con todo y la pandemia”, acusó otra en alusión al mandato de las autoridades de no realizar ninguna actividad cuando estábamos en el semáforo rojo.
Al no obtener respuesta, ni quien diera la cara, los afectados señalaron que ya pidieron la intervención de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), pero desafortunadamente la respuesta tampoco ha llegado.