Playa del Carmen, QRoo.- En el marco del Día mundial de la Diabetes, aún existen mitos a vencer sobre este padecimiento que en 2016, generó cerca de 105 mil 500 fallecimientos en nuestro país.

Estamos en una época que requiere eliminar mitos

Cada 14 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Diabetes, fecha elegida al ser el aniversario de Frederick Banting, que junto con Charles Best, concibió una idea tan importante, que tuvo como resultado el descubrimiento de la insulina, en octubre de 1921.

De no tratarse adecuadamente, la diabetes, según indica la Secretaría de Salud, culmina en complicaciones a largo plazo como “daños en los nervios, retinopatía diabética, ceguera, pie diabético, amputaciones, daño renal, insuficiencia renal crónica, dificultad para controlar la tensión arterial y el nivel del colesterol, disfunción eréctil”.

Algunos mitos recurrentes

Pero qué tanto sabemos sobre este padecimiento y cuál de toda esa información que manejan los medios de comunicación es verídica.

En un artículo publicado por la Dra. Victoria Rajme Haje, Médico Cirujano y Educadora en Diabetes certificada y Miembro del Consejo Nacional de Certificación de Educadores en Diabetes, existen mitos frecuentes sobre este padecimiento, como por ejemplo, que “la diabetes es curable, lo cual es falso.

“La diabetes es una enfermedad crónica que se controla y hasta hoy día no se puede curar. Recuerda que la diabetes se debe a que existe una falla en la insulina, un problema de calidad en su producción o a una deficiencia de los receptores de la misma, lo que no permite su trabajo adecuado”, explica la Doctora.

Otro mito es que “la medicina alternativa cura la diabetes”, lo cual según la Doctora Victoria Rajme Haje es incorrecto. “Las curas milagrosas con medicina alternativa, vacunas, tés, hierbas, imanes, etc. no desaparecen la diabetes de tu organismo. Lamentablemente, muchas personas con diabetes que acuden a estos “métodos” abandonan el tratamiento médico (de insulina, por ejemplo), lo que provoca que su padecimiento se agrave”.

No crecer y enfermarse de un coraje

En este trabajo, publicado para la Federación Mexicana de Diabetes, menciona otro mito: “Los niños con diabetes no crecen”, lo cual es falso. “Los niños con diabetes que toman con responsabilidad el cuidado de su diabetes, siguen todas las indicaciones médicas y conocen su padecimiento tienen un crecimiento normal. En realidad los infantes y adolescentes con diabetes pueden no alcanzar una estatura deseable cuando su tratamiento con insulina es inadecuado”, apunta la experta.

Existe un mito que señala que “un enojo, susto o impresión provocan diabetes”, lo cual está equivocado porque “. La diabetes es una enfermedad causada por fallas en el metabolismo o forma en la que el cuerpo utiliza y aprovecha los alimentos, los factores de riesgo son la probabilidad que tiene un individuo de desarrollarla”.

La especialista resalta que hay personas que aseguran que “los licuados de nopal, verduras u otras hierbas reducen la glucosa por alguna sustancia mágica que contienen”, lo cual es en parte verdadero.

“Sí tienen un efecto positivo, pero de ninguna manera se puede considerar que curen, alivien o controlen la diabetes. El nopal se consume en México desde la época prehispánica y existen muchos mitos sobre su poder curativo en diabetes. Igual que otras verduras o hierbas, como acelgas, alfalfa, apio, espinacas, hojas de chaya, hojas de chicozapote o pepino, el nopal contiene fibra y agua en grandes cantidades”, apunta.

Expone que “la fibra hace más lenta la absorción de glucosa y ofrece una sensación de saciedad que te lleva a comer menos. También hay que tener en cuenta que este tipo de licuados aportan pocas calorías”.

Igualmente, destaca que hay gente que cree también que “los pacientes con diabetes deben consumir dietas de bajo contenido en hidratos de carbono”, lo que es falso. “La alimentación de todas las personas con o sin diabetes debe ser variada sin caer en excesos o deficiencias. Cuando se trata de diabetes debes cuidar el consumo de azúcares complejos como refrescos o pan de dulce y de grasas saturadas como mantequillas, o mantecas”.

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Uno de los mitos que igualmente destaca la Doctora, es que “la insulina provoca ceguera, amputaciones, daño en riñón y diversas complicaciones”, lo que es falso. “La aparición de complicaciones a largo plazo coinciden muchas veces con la prescripción médica de insulina. Esto no obedece a la aplicación de insulina, sino a que se ha mantenido un descontrol prolongado de los niveles de glucosa que ha ido afectando diversos órganos de nuestro cuerpo”.