La disyuntiva entre crecimiento urbano y preservación ambiental es un difícil equilibrio que deben enfrentar todos los municipios del país y el mundo; sin embargo, las dificultades de cada lado son mayores al considerar casos como el de Tulum, con una riqueza natural inigualable, pero también con un aumento poblacional como pocos. Frente a la encrucijada, la actual admistración se ha abierto a la ciudadanía, para que de forma conjunta se acuerden solucionen.
El despegue económico de Tulum, gracias a su detonación como destino turístico, ha generado un crecimiento nunca antes visto en este joven municipio; lo que a su vez genera grandes desafíos en materia de desarrollo urbano que, de no ser resueltos adecuadamente, desembocan en asentamientos irregulares.
Las invasiones que han surgido en Tulum en los últimos años son no solo un foco de contaminación y un problema social, al ser una población a la que no se les pueden, legalmente, ofrecer servicios y obras públicas, sino que además son un factor de inseguridad, por las riñas internas entre “liderazgos” y los conflictos que derivan de la falta de certeza sobre la tierra.
Con todos estos antecedentes, el Cabildo actual tomó al decisión de cambiar el uso de suelo sobre varias hectáreas de terreno, para incentivar la construcción de viviendas que den abasto a la demanda de esta población creciente.
Sin embargo, esta densificación hizo que surgieran dudas y objeciones por parte de la sociedad civil organizada, en especial de los arquitectos e ingenieros. Ante ello, el Ayuntamiento de Tulum que encabeza Víctor Mas Tah optó por revertir la decisión tomada previamente, demostrando su sensibilidad ante el sentir ciudadano.
Los retos que traen consigo el desarrollo, como la sobredensificación, la generación de desechos, el brindar más servicios para una mayor población, continúan ahí, pero ahora se tratará de buscar un balance con auxilio de la ciudadanía.
Comunicado de Prensa sobre la decisión del H. Cabildo de Tulum de revocar los efectos de actas aprobadas en sesiones pasadas. pic.twitter.com/UenKjund67
— Ayuntamiento de Tulum (@Ayto_Tulum) January 30, 2020
Y es que el crecimiento vertiginoso y sin orden, que se produce cuando a un lugar llega más gente de la que un destino puede recibir provoca diversas problemáticas como las ya descritas anteriormente, pese a la derrama económica que el turismo puede generar. Como ejemplo algunas situaciones que se viven en destinos como Cancún, Playa del Carmen o Holbox.
Ante ello el noveno municipio encabezado por Víctor Mas revirtió incrementar la densidad autorizada en una superficie de más de mil 800 hectáreas, lo cual permitirá preservar al Gran Acuífero Maya y a su vez reducirá los impactos que se puedan sufrir por el desarrollo de grandes construcciones.
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Sin embargo, esto no evitará que se sigan buscando proyectos e inversiones, tal como recientemente hizo Víctor Mas Tah al acudir a la Fitur de Madrid. Pero cabe recordar que, tal como lo planteó el mismo edil desde España, lo que se busca son proyectos sustentables, que vayan en armonía con el ambiente y con el destino ecológico, cultural, sostenible y representante de la gran cultura maya que busca seguir siendo Tulum.