Varias regiones de España se encuentran en alerta roja debido a la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), también conocida como ‘gota fría’. Este fenómeno ha sido catalogado como uno de los desastres naturales más alarmantes de los últimos 75 años en el país. Las autoridades han reportado que, a causa de las severas tormentas, al menos 95 personas han perdido la vida y miles más se han quedado sin electricidad y sin movilidad.
En medio de este devastador evento natural, Luis Zamalloa, un reconocido odontólogo, ha generado indignación en las redes sociales tras solicitar comida a domicilio durante la tormenta. A través de un video compartido en su cuenta de Instagram, Zamalloa explicó que había pasado todo el día fuera de casa, primero trabajando en su clínica y luego asistiendo a una gala, lo que le impidió cocinar.
“Familia, buenas noches. Acabo de llegar a casa. Bueno, no sé, por decir algo, porque he pillado el diluvio universal. Vengo del centro”, comentó Zamalloa en el video. Posteriormente, mostró la llegada de un repartidor empapado por la lluvia, quien le entregó su pedido. “Me he pedido un ‘macas’. Hoy es día de darle al de Glovo propina, ¿eh? Se la voy a dar en cash, además, porque menuda lluvia se ha comido, el pobre. Que nada, chavales, buenas noches. Sed felices, trabajad mucho, que todavía no se ha pagado”, añadió.
En el video, se observa a Zamalloa entregando al repartidor un billete de diez euros como propina, comentando: “Con la que está cayendo en Madrid no se merece menos este máquina (…) La que te ha caído, ¿eh? Hoy te lo has ganado, macho”.
Las reacciones en redes sociales no se hicieron esperar. Muchos internautas criticaron duramente al odontólogo por su falta de consideración hacia el repartidor. Comentarios como “Hay que tener muy poca vergüenza y encima lo subes a las redes alardeando de tu buena voluntad por darle propina” y “Vaya sinvergüenza” inundaron las plataformas.
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La polémica ha puesto de manifiesto la sensibilidad de la sociedad ante actos considerados insensibles en momentos de crisis, y ha abierto un debate sobre la responsabilidad y empatía en el uso de servicios de entrega durante situaciones extremas.
Con información de Milenio