Miguel Ángel Félix Gallardo “El Jefe de Jefes”, uno de los capos más temidos durante los 70 y 80, hoy se encuentra muy delicado de salud. Tanto que está pidiendo purgar lo que queda de su condena en prisión domiciliaria.

“El Jeje de Jefes” asegura que padece problemas de la vista y del oído. Aseguran que ya no ve y tampoco escucha muy bien., Está preso desde 1989. Además asegura tener problemas en sus articulaciones, los cuales han sido causados por la artritis y tiene incluso otros males.

De ser uno de los capos emblemáticos y más poderosos de México en la década de los 70 Y 80, Miguel Ángel Félix Gallardo pasa sus días en prisión sin poder acceder a la prisión domiciliaria y en medio de un deterioro físico cada vez más severo, asegura el columnista Ricardo Ravelo.

Con pocos resultados, sus abogados han gestionado desde hace varios años, que el ex jefe del Cártel de Guadalajara pueda cumplir su condena en prisión domiciliaria, pero las autoridades han negado ese derecho que le asiste.

El ex capo Félix Gallardo ya bordea los 75 años de edad, por lo que sí podría concedérsele la prisión domiciliaria.

Su situación contrasta con la de sus socios, quienes ya abandonaron la prisión. Nos referimos a Ernesto Fonseca Carrillo y Rafael Caro Quintero.

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“Don Neto” dejó la cárcel en julio de 2016. Desde entonces cumple su condena en una de sus propiedades, ubicada en Metepec, Estado de México; mientras que Caro Quintero fue liberado en 2013 gracias a sus abogados, que interpusieron un recurso que determinó que el capo fue juzgado por el caso de Enrique Camarena por una autoridad no tenía competencia para hacerlo.

“El Jefe de Jefes” fue sentenciado por dos delitos: narcotráfico y el asesinato del agente de la DEA, Enrique Camarena. Por el primer delito ya cumplió su condena. Por la muerte del agente de la DEA se le sentenció a 30 años, de los que ya ha cumplido 28.

Por ahora Félix Gallardo permenece en el Centro Federal de Readaptación Psicosocial de Morelos, debido a que las autoridades, pese a su edad y su delicado estado de salud, le han negado la prisión domiciliaria, aunque a sus socios sí se les autorizó.