La presencia de un ratón que supuestamente salió de la comida de un pasajero obligó a un vuelo de Scandinavian Airlines (SAS) que partió de Oslo con destino a Málaga a realizar un aterrizaje no programado en Copenhague.
El suceso tuvo lugar durante un vuelo de Oslo a Málaga, cuando el ratón saltó del interior de la comida que llevaba un pasajero. Ello obligó al piloto a tener que aterrizar en la capital danesa.
“Lo creas o no, una señora a mi lado… abrió su comida y un ratón saltó”, ha contado uno de los pasajeros de ese vuelo, Jarle Borrestad.
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Las compañías aéreas prohíben estrictamente la presencia de roedores a bordo, ya que estos animales podrían mordisquear el cableado eléctrico, clave para el funcionamiento de un avión.
Un portavoz de la aerolínea SAS, Oystein Schmidt, ha confirmado el incidente en declaraciones a la agencia AFP y ha explicado que la compañía siguió sus protocolos pertinentes y cambió a los pasajeros de avión para que pudiesen llegar a España en otro vuelo.
Schmidt ha asegurado que incidentes como el que ha tenido lugar son “extremadamente raros” y ha destacado que la aerolínea ha puesto en práctica sus procedimientos para este tipo de situaciones.
Una de las medidas llevadas a cabo ha sido la “revisión con nuestros proveedores para asegurarnos de que esto no vuelva a suceder”, ha reiterado el portavoz de SAS.