Luis Fernando Amezcua, es un buzo que desde Mahahual viajó a Ciudad de México para apoyar a labores de rescate tras el fatal sismo del 19 de septiembre.
Luis Fernando Amezcua quería salvar vidas
Su nombre es Luis Fernando Amezcua y en una noticia que estremeció a piel de muchos quintanarroenses, publicada en El Universal, se dio a conocer lo que este buzo fue a hacer a Ciudad de México tras el sismo del 19 de septiembre: dejar googles y aletas para ir a salvar vidas entre los escombros.
No obstante, sus amigos seres queridos ya conocían el espíritu de este buzo de origen veracruzano, que publicó el 19 de septiembre por la noche en sus redes sociales: “Si alguien sabe de alguna brigada para ir a la CDMX donde me pueda integrar, tengo equipo y conocimientos de salvamento y rescate, considérenme por favor”.
Un viaje fructífero
Con una labor personal de recaudación, juntó con ayuda de sus amigos algo de dinero y se dispuso a viajar a la capital para apoyar en la búsqueda de sobrevivientes.
Avalado como rescatista y paramédico, Luis Fernando Amezcua se presentó 31 horas después del fatal sismo en Parque España y junto con personal de Bomberos de Cuautitlán y SEDENA, ingresó al lugar de derrumbe ubicado en la esquina de Ámsterdam y Londres, en la colonia Condesa.
Después de múltiples maniobras y de escabullirse pecho tierra por un estrecho boquete al que previamente se le introdujeron micrófonos, primero localizó el cuerpo sin vida de un hombre dentro de un automóvil y luego, pudo ubicar a una mujer que aún se encontraba con signos vitales, no sin antes hacer una exhaustiva labor como si nadara entre el concreto colapsado, relata Viridiana Ramírez, la periodista que dio a conocer masivamente esta historia.
Posteriormente Luis Fernando salió de entre los escombros para gritar: ¡Viva! Y la mujer rescatada por este buzo logró recibir los primeros auxilios y ser canalizada a una unidad médica de atención.
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Los últimos informes apuntan que tras el exitoso rescate, este buzo rescatista, siguió removiendo escombros y aunque poco a poco se pide la retirada de los rescatistas civiles, él continuaba apoyando en lo que más le gusta: cuidar la vida de sus semejantes.
(Foto: Luis Fernando Amezcua)