De acuerdo con un oficio con número “SRA/DGIRA/DG-05567-22” y sellado el 27 de octubre ese mismo día por la Dirección General de Impacto Ambiental, el 13 de septiembre pasado, la Sedena, quien funge como el promovente de dicha obra, ingresó a esta dependencia el desistimiento de este procedimiento de evaluación de impacto ambiental.

Lo anterior, luego que la Sedena, el 23 de agosto, a través del General de Brigada I.C.D.E.M. Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, en su carácter de Ingeniero Residente General y Comandante del Agrupamiento de Ingenieros “Felipe Ángeles” de la Sedena, ingresó el Documento Técnico Unificado que incluye el Estudio de Riesgo Ambiental correspondiente al proyecto para su análisis y resolución en materia de impacto ambiental y cambio de uso de suelo en terrenos federales.

En ese sentido, este oficio señala que, en consecuencia de este desistimiento, se finalizó el procedimiento y archivó este asunto “como total y definitivamente concluido”.

Cabe mencionar que este oficio se enmarca a poco menos de un mes y medio que se diera a conocer que el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el 2023 no contempla recursos asignados específicamente para la conclusión del Aeropuerto Internacional de Tulum.

Este proyecto de 15 mil 500 millones de pesos fue, en consecuencia, clasificado entonces por la Sedena y por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en el paquete de programas y proyectos de inversión registrados “sin asignación de recursos en 2023”.

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Esto pese a que la obra es considerada prioritaria para “mejorar las operaciones de vigilancia que realiza la Sedena en el área de influencia, tomando en cuenta que no existe infraestructura aeroportuaria en la Riviera Maya capaz de soportar y asistir problemas de seguridad y eventos hidrológicos graves”