Un hombre encontró 62 currículums vitae en la basura, los recuperó y los repartió entre varias empresas; gracias a su a ello al menos 14 personas encontraron trabajo.
Se trata de Kaká D’Avila, un concejal de Porto Alegre, Brasil, que encontró 62 currículums en un contenedor de basura y los repartió entre algunas empresas, su buena acción ayudaría a que 14 personas tuvieran un nuevo trabajo.
“¡Absurdo! Esta semana encontré 62 currículums en la basura de la calle. ¡Falta de respeto a los desempleados!”, escribió D’Avila en su cuenta de Instagram.
Con la intención de ayudar, se dedicó a rehacerlos ya que algunos estaban muy arrugados, y cuando estuvieron listos los guardó en el “Currículum joyero”, donde se conservaron intactos hasta que llegó el momento de darles una segunda oportunidad.
“Reuní los currículums y los rehice todos. Para valorar cada uno de ellos, creé este ‘Currículum joyero’ y así es como voy a las empresas para distribuirlos. Algunos incluso han sido contratados”, detalló el concejal.
A través de sus redes sociales, D’Avila compartió algunas fotografías de los documentos tirados en la basura, mientras que en otra imagen se observan impecables, después de dedicarse a repararlos para que quedaran como nuevos.
“Hice lo que todos deberían hacer en esta situación. Detrás de cada hoja de papel hay una vida que merece respeto”, aseguró el hombre.
De la basura a un trabajo
Luego de repartir los currículums en varias empresas que tenían vacantes, logró que 14 personas encontraran trabajo, solo dos semanas después de la iniciativa inesperada del concejal, quien se mostró indignado por las condiciones en que terminan estos documentos.
De hecho, una de las personas que encontró trabajo le agradeció por enviar los currículums, ya que una empresa lo contrató como almacenista, luego de que el concejal dijera que quizá ese joven dejó de comer “para gastar en copias de su currículum, se fue a pie a dejarlo a las empresas y terminaron en la basura”.
Consideró que al tirarlos a la basura, las empresas dejaron en manos de desconocidos la información de los candidatos, pues en los currículums algunas veces se añade número telefónico, dirección y una fotografía.
“Se expusieron todos los datos personales de los candidatos”, agregó.