El presidente de la república Andrés Manuel López Obrador (AMLO) negó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) haya espiado a periodistas y defensores de derechos humanos, tal como lo diera a conocer una investigación de varios medios de comunicación.
En la mañanera de este martes, una reportera de Animal Político, uno de los medios espiados cuestionó al presidente sobre el tema. Sin embargo, el mandatario federal dijo que esto no es cierto, que eso ya no pasa en su sexenio porque según él no son iguales.
“No es cierto que se espíe a periodistas o a opositores, no somos iguales, como los anteriores, no es cierto. Yo hice el compromiso de que nadie iba a ser espiado, ningún opositor. Entonces si tienen pruebas que las presenten”, respondió AMLO ante los cuestionamientos de Nayeli Roldán de Animal Político.
Y prosiguió: “He estado leyendo sobre esta denuncia, y la verdad no hay elementos, no tendríamos por qué, además de ser indebido y contrario a nuestros principios y nuestras convicciones, nosotros que hemos sido espiados durante años prácticamente,seguidos por años, no podríamos hacer lo mismo”.
López Obrador mencionó que uno de los espiados es Ricardo Raphael. Dijo que no vería el caso de espiar a este periodista.
Cabe resaltar que de acuerdo con una investigación de diversos medios, el Ejército mexicano compró, en 2019, un programa para el “servicio de monitoreo remoto de información” que se usa para intervenir los teléfonos celulares, una versión mejorada del software Pegasus.
Al menos tres personas fueron víctimas de espionaje, sus teléfonos habrían sido intervenidos. Se trata de un periodista de Animal Político, de quien no se reveló su nombre; Raymundo Ramos, un defensor de derechos humanos de Tamaulipas, y el periodista y escritor Ricardo Raphael.
Te puede interesar: Investigación confirma que Sedena ha espiado a periodistas durante sexenio de AMLO
Y tal como se esperaba, el gobierno ha negado que el espionaje haya ocurrido, pese a que existen pruebas de que sí se realizó.
AMLO insiste con su discurso de ser diferentes, aunque sus acciones no concuerdan en muchas ocasiones con sus palabras. Tal como en este caso, pues la Sedena sí habría espiado a periodistas y defensores de derechos humanos.