Este alcalde se ha dado a conocer en México y fuera del país, pues se hizo pasar por un discapacitado para conocer el trato de sus trabajadores sociales.
Se trata del edil Carlos Tena, de Cuauhtémoc, Chihuahua.
Alcalde fingió ser discapacitado para vivir en carne propia el trato de sus trabajadores
Tena simuló tener una lesión en el rostro, se cubrió con una venda, usó lentes negros, vistió una sudadera con gorro y se cubrió las piernas con una cobija.
Con su nuevo atuendo, se dirigió a la Dirección de Desarrollo Social para solicitar una despensa, pero no fue bien atendido.
Los servidores públicos lo ignoraron y discriminaron, salvo una empleada que le ofreció una gelatina.
El alcalde afirmó que se le hizo “un nudo en la garganta”, al ver la indolencia de algunos de los miembros de su gabinete.
Tena, un hombre conocido por su lucha social, que incluso ha ayudado a las personas en sus visitas a dependencias gubernamentales, vivió en carne propia el mal trato de los burócratas.
Tras ser rechazado, el alcalde acudió a otra área, cercana a su despacho, donde de nueva cuenta recibió un trato diferente al que él ha pedido a su equipo.
Asimismo, durante su “actuación”, tuvo que atravesar diversos obstáculos, como el usar un elevador del que no encontraron la llave.
Llegando a un mezanine, se puso de pie y fue cuando los empleados descubrieron que se trataba del edil.
“Me dio coraje que las personas que están ahí trabajando y ganan un sueldo y tratan mal a la ciudadanía. Les dí su buena leída de cartilla y les dije que no quería volver a saber que trataron mal a alguien”, señaló este edil en entrevista para Milenio.
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Tena confirmó que planeó este experimento desde hace dos meses: “decidí hacerlos porque no sabía a quién creerle si al ciudadano o al compañero de trabajo”, indicó.