Jesús Murillo Karam, extitular de la extinta Procuraduría General de la República (PGR), ha obtenido prisión domiciliaria gracias a un juez de control del Reclusorio Sur, en el contexto del caso Ayotzinapa. Permanecerá en su domicilio bajo la vigilancia de la Guardia Nacional y la Fiscalía General de la República (FGR).
El exfuncionario fue trasladado el sábado desde la Torre Médica del penal de Tepepan, donde recibió el alta hospitalaria, a su residencia en las Lomas de Chapultepec. Según una valoración médica realizada en julio de 2023 en el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez”, el político padece de hipertensión arterial sistémica, enfermedad pulmonar obstructiva e insuficiencia vascular.
El juez Juan José Hernández Leyva ordenó a la Guardia Nacional regresar a Jesús Murillo Karam al hospital penitenciario para tramitar su alta médica, tras lo cual fue trasladado a su domicilio. Mientras esté en prisión domiciliaria, el exgobernador de Hidalgo estará sujeto a siete medidas de control establecidas por las autoridades.
Entre estas medidas de control, se destaca que Murillo Karam deberá estar vigilado de forma permanente por agentes de la Guardia Nacional o la Fiscalía General de la República alrededor de su casa para evitar una posible fuga. Además, se llevará un registro de las personas que lo visiten y se le prohíbe comunicarse con las víctimas o testigos del caso Ayotzinapa. Asimismo, el exprocurador entregó su pasaporte y visa, y se emitirá una alerta migratoria para notificar que no puede abandonar el país.
Eso sí, no es necesario que porte un brazalete electrónico, pues la medida fue considerada improcedente.
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La decisión de conceder prisión domiciliaria a Jesús Murillo Karam ha generado diversas reacciones en la opinión pública, en un contexto donde el caso Ayotzinapa sigue siendo motivo de atención y demanda de justicia por parte de diversos sectores sociales.
Actualmente enfrenta dos procesos penales por desaparición forzada, tortura y obstrucción de la justicia, en el marco del caso de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, ocurrida en septiembre de 2014.
Con información de Aristegui.