Playa del Carmen.- “Lo de la apuesta sigue en pie, eso no tiene nada que ver con que te voy a romper la madre”, tales fueron las palabras de Carlos Mimenza, al amenazar al director de Quinta Fuerza, Ariel Urtaza, en un audio que le envió por vía WhatsApp y que él ahora reprodujo por error en su programa de internet, “Última llamada”.

En este programa, publicado en su página de Facebook “Rescatemos Solidaridad”, proyecto político disfrazado de social, Carlos Mimenza estuvo por casi una hora divagando y calumniando a distintas personas, en un evidente y triste intento de querer obtener impunidad, a base de amenazas.

Como un bravucón, Mimenza utiliza esta plataforma para exigirle a las autoridades o a la prensa a que “no se metan con él”, de lo contrario él los calumniará ante sus seguidores.
Incluso, en un programa anterior quiso extender esta imaginaria impunidad hacia una amiga, diciéndole a las autoridades que si la perjudican a ella, él los atacará.

“No te conviene que me fije mucho en tí”, era una frase muy utilizada por este megalómano, ya sea para evitar que sus empresas reciban las visitas habituales de fiscales, ya sea que algún medio publique algo en contra suya, o cualquier otra condicionante que él quiera imponer.

Con aires de dictadorzuelo, totalmente fuera de sus cabales, Mimenza se dirigió a la fiscal anticorrupción y dijo que quería visitarla para “verla directamente a los ojos y conocer su alma”. Hasta al gobernador le “ordenó” de que viniera a sentarse con él, en su oficina en Playa del Carmen, teniendo para ello 42 horas.

Ni siquiera su propio equipo de producción se salvó de su inaudita soberbia, pues al retrasarse en la colocación de un video, él dijo abiertamente al aire que había contratado a gente inepta. Esto, antes de ponerse a cantar como Hugo Chávez, pero con letras amenazadoras.

Ver a este energúmeno creerse amo y señor, únicamente por tener dinero y algo de notoriedad como “influencer” es un espectáculo más de risa que de temor, como él se lo imagina. El único escalosfrío que pudiera hacer sentir a un ciudadano, es al imaginar a una persona así de narcisista con poder político, como él tanto ambiciona.

Sin embargo, toda su fastuosidad, falsas sonrisas y peores calumnias llegaron a un abrupto fin, cuando quiso justificar las amenazas que lanzó por varios días en contra del director de Quinta Fuerza, Ariel Urtaza, afirmando que son amigos (falso) y que “así nos llevamos”.
Para este fin, primero leyó unos mensajes de la acalorada conversación sostenida, en la que Ariel Urtaza, entendiblemente alterado y molesto por las amenazas y acoso, insultaba a Mimenza.

Pero luego, también quiso reproducir algunos de los audios en los que “bromeaba” con el comunicador, solo que, por error, reprodujo en vivo y ante todos, una de estas múltiples amenazas realizadas.

“Lo de la apuesta sigue en pie, eso no tiene nada que ver con que te voy a romper la madre”, se escuchó en los micrófonos de su estudio, construido para sus campaña adelantada.

De inmediato, el hasta entonces sonriente empresario, detuvo abruptamente la grabación y la recorrió a otro punto, disculpandose con el auditorio por el lenguaje, pero insistiéndo falsamente que “así nos llevamos”.

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Lo cierto es que Carlos Mimenza ya fue denunciado ante la Fiscalía General de la República por esta y otras amenazas en contra del comunicador, a quien le dijo que le quitaría sus contratos comerciales, le obligaría a que le entregara su página de internet, e incluso que lo tiene vigilado y que se “preocupa por su salud”.

CALUMNIAS AL POR MAYOR

En gran parte de esta trasmisión, Carlos Mimenza Novelo lanzó diversas calumnias tanto contra Quinta Fuerza y su director, así como contra otro periodista, Amir Ibrahim, a quien él igualmente amenazó. Rebatirlas resultaría hasta ocioso, pues se trata de una persona que ya fue condenado por un juez por amenazar a un periodista y que ahora reincide en la conducta y que evidentemente está desperado pues la Fiscalía General de la República ya abrió un expediente en su contra.

No obstante, únicamente diremos que una de las amenazas recurrentes por parte de este empresario y presunto ex-prestanombres era que él se encargaría de quitarle a Quinta Fuerza sus contratos comerciales. Cómo lograría esta hazaña no estaba claro, pero ahora ya sabemos que, de manera por demás patética, trata de engañar con mentiras, para querer dañar la imagen de este medio.