México.- Casa Magna, la fastuosa residencia del narco Pablo Escobar, se convertirá en un hotel de 40 habitaciones en la Riviera Maya.
De un propietario narcotraficante a un paraíso turístico
En la península del Yucatán, entre cenotes, naturaleza salvaje, y playas increíbles bañadas por el Caribe, espera la ciudad de Tulum, una de las más importantes reservas mayas del país.
En esta zona, diferentes complejos de alto nivel, hoteles y boutique compiten, además, para recibir a la población turística para dibujar las perfectas vacaciones.
Uno de estos nuevos alojamientos es Casa Magna, pero no es uno más; El nuevo y fastuoso complejo frente al mar fue una vez propiedad de uno de los narcotraficantes más famosos de todos los tiempos, Pablo Emilio Escobar Gaviria, el mayor capo colombiano de la droga, quien fue dueño y hoy esta propiedad se ha convertido en el exquisito hotel Casa Malca.
No es la primera propiedad de la zona, hoy una alternativa exclusiva a la zona de Cancún- relacionada con el ‘patrón del mal’ como lo bautizó Netflix en la serie sobre su vida, allá por 2012. Y eso que no hay evidencias reales de que el narcotraficante estuviera nunca aquí.
Paraíso caribeño
Precisamente este complejo está junto a Casa Malca, donde se cuenta que Escobar veraneaba hasta que fue abatido a tiros en 1993 en Medellín. Después, la propiedad fue confiscada y quedó abandonada hasta que el coleccionista, Lio Malca, también colombiano, la adquirió para transformarla en un exquisito hotel.
Casa Malca, considerado hoy poco menos que un paraíso en la Tierra. Además de su excelente ubicación frente al mar en inmerso en la jugla mexicana de la reserva natural de Sian Ka’an, el hotel está decorado con obras de arte que van desde Marco Brambilla a Keith Haring, George Condo, Vik Muniz, Kenny Scharf o Andy Warhol.
Sus nuevos propietarios invertirán 100 millones de dólares para transformar el complejo en un hotel de lujo con 40 habitaciones.