Una mujer llevó a un anciano muerto en una silla de ruedas hasta un banco para cobrar el dinero de su pensión.
El hecho se registró hace unos días en la ciudad de Campinas en San Pablo, Brasil. Todo comenzó cuando la mujer decidió llamar a la sucursal del Banco do Brasil para avisar que había perdido la contraseña de la cuenta de su supuesto compañero, un viudo de 92 años.
El macabro plan se vio “arruinado” porque necesitaba la clave para realizar el trámite y no la tenía. Por ello el banco exigió entonces la presencia del titular de la cuenta: el hombre ya fallecido.
Según informó El Universal, la mujer, lejos de cancelar su plan, puso en condiciones estéticas al muerto, lo sentó en la silla de ruedas y se presentó en la sucursal del banco.
Allí explicó que el hombre no se sentía bien porque estaba cansado. Sin embargo, en la entidad bancaria notaron que algo extraño sucedía y de inmediato llamaron al personal de seguridad y a los bomberos, quienes descubrieron que el anciano llevaba 12 horas fallecido, según explicó José Henrique Ventura, director del departamento de la Policía Judicial de San Pablo.
“La mujer afirma que fue su compañera durante algunos años, pero que no tenía poder para mover o alterar la cuenta”, destacó Ventura.
A partir del informe, se iniciará “una investigación por fraude” dónde intentarán averiguar qué pensaba hacer con el sujeto y con el dinero que obtuviera.
Por su parte, los directivos del Banco do Brasil aseguraron que no había asuntos pendientes con la cuenta del beneficiario. “Se cumplió con todos los protocolos previstos en el contrato de prestación del servicio con la fuente de pago. Solo faltaban de credenciales para acceder a la cuenta y realizar el retiro”, manifestaron