Chetumal.- Será hasta el miércoles que se reanude la audiencia para determinar si Martha Nikita Espat Avilés, sentenciada por el homicidio de un empresario, puede gozar de libertad anticipada.
Espat Avilés ha purgado 11 años de una sentencia de 18 años, por el homicidio de José González Sabido “Pepín”, a quien ella asfixió y acuchilló en 2007, según su propia confesión, al acusarlo de que abusaba de sus dos hijos.
El abogado Raúl Ojeda González, quien representa a la familia de la víctima, se opone a la liberación de esta mujer, pues en múltiples ocasiones ha sido señalada como “líder” del Centro de Readaptación Social (Cereso). Incluso, un grupo de 70 internas la acusaron de tener una red de prostitución, la que fue investigada y que derivó en la destitución del alcaide del penal.
Sin embargo, aceptó que no presentó pruebas de estos hechos, pues son hechos dados a conocer en la prensa, sin descartar hacerlo en una etapa posterior.
Otro argumento que dice es que no hay constancia de que se le hayan hecho exámenes psicológicos para determinar si amerita una libertad anticipada.
Incluso, el representante de la división de penas se limitó a leer un informe, lo que le reclamó a la jueza pero que permitió “para agilizar”. A la hora de preguntarle, no sabía si hubo exámenes psicológicos, labor social u otros requisitos.
“No hay información que se sustente que debe estar libre de forma condicionada, por lo que no debe considerarse”, alegó.
