Un enfrentamiento entre civiles armados dejó sin energía eléctrica a una comunidad a las afueras del poblado de Imala en Culiacán, luego de que los sicarios derrumbaran parte del cableado y causaron otros destrozos antes de retirarse.

Vecinos de la sindicatura de Imala, localizada a unos 25 kilómetros de Culiacán, reportaron el enfrentamiento a las autoridades, señalando, además, que se habían quedado sin energía eléctrica, por lo que elementos de las distintas corporaciones se trasladaron al sitio para verificar.

Sobre el camino a esta localidad, las autoridades localizaron un vehículo incinerado, ponchallantas en el pavimento, un montículo de llantas incendiado, y cables de energía eléctrica en el suelo.

Al extender los trabajos de revisión, personal de la Defensa encontró una unidad en aparente estado de abandono, con varios cartuchos en su interior, los cuales fueron asegurados por la autoridad federal.

Tal como lo indicaba el reporte, dicha comunidad estaba sin energía eléctrica y se encontraron casquillos percutidos en los alrededores, como resultado del enfrentamiento.

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Enfrentamiento duró más de una hora

De acuerdo a los pobladores, el enfrentamiento se habría registrado la madrugada del lunes, y se prolongó por más de una hora, causando daños en algunas viviendas, dejando impactos de bala en los inmuebles y decenas de cartuchos como evidencia en el poblado de Culiacán.

La Secretaría de Seguridad Pública reportó haber realizado patrullajes en la zona sin lograr localizar a las personas responsables, por lo que decidieron retirarse. Sin embargo, al momento de salir del poblado, nuevamente encontró ponchallantas en la carretera.

Durante la noche, también se localizado una persona sin vida en la sindicatura de Costa Rica, presencia de gente armada en algunas colonias, y el ingreso de algunos de ellos al Residencial Masaryk, donde algunos de ellos arribaron a una camioneta con logos de la CFE, forzaron la puerta de un domicilio e ingresaron para llevarse dinero y otras pertenencias.

Policías de Culiacán renuncian tras negarse a realizar el examen de control de confianza

Luego de la ola de violencia que se ha vivido en Culiacán, el pasado mes de octubre regresaron a servicio los primeros 870 elementos de la Policía Municipal y Tránsito de Culiacán, a quienes se les entregó sus armas de cargo tras aprobar el examen de control de confianza.

Sin embargo, 99 agentes de la corporación se negaron a volver ser evaluados y presentaron sus respectivas renuncias.

Fue por más de un mes que elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional mantuvieron en revisión todo el armamento del personal de la Policía Municipal de Culiacán, por lo que decidieron autorizar el retorno de un primer grupo al servicio.

Gerardo Mérida Sánchez, secretario de Seguridad Pública del Estado, informó que del primer grupo evaluado por la Guardia Nacional, solo 12 oficiales reprobaron el examen de control de confianza; por lo que corresponde a la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito de Culiacán definir su situación legal.