Estados Unidos.- Un empleado de un cementerio murió luego de que le cayera una gran cantidad de tierra encima que él mismo había cavado para sepultar un cadáver.
Los hechos se registraron en el Washington Memorial Park, en Estados Unidos, cuando Rodwin Allicock, de 42 años, se encontraba dentro de una fosa de aproximadamente 2 metros de profundidad.
De acuerdo con lo que informaron los trabajadores, el gran montículo de tierra se cayó y lo enterró vivo, aunque gritó por ayuda y los bomberos fueron llamados por sus compañeros, no sobrevivió.
Las autoridades iniciaron una investigación sobre lo ocurrido y un forense confirmó su deceso.
Con información de ABC News y People