En los últimos días, el Hospital General de Gómez Palacio, en el estado de Durango, ha sido centro de atención debido al uso de insumos no adecuados para la atención médica. Imágenes que se viralizaron en redes sociales mostraron cómo se emplearon un vaso de unicel y un frasco de café instantáneo para fines médicos, lo que ha generado un gran descontento entre la ciudadanía.
El Hospital General de Gómez Palacio enfrenta una situación crítica debido a la sobrepoblación, provocada en parte por la remodelación del Hospital General de Lerdo, un municipio vecino. Esta sobrepoblación ha llevado a una escasez significativa de insumos médicos, con un déficit reportado del 45% en medicamentos y otros suministros esenciales.
La ciudadanía ha expresado su indignación a través de las redes sociales, exigiendo explicaciones y responsabilidades por la situación. El gobernador del estado, Esteban Villegas, se ha pronunciado sobre el tema, destacando que la sobrepoblación en el hospital es una de las causas principales de la escasez de insumos. Además, ha llamado a los responsables a asumir su responsabilidad y presentar su renuncia si es necesario.
Primero confirmó que su equipo de trabajo verificó que, efectivamente, estas prácticas ocurrieron en el hospital antes mencionado, por lo que pidió disculpas y adelantó que se implementarán cambios en la dependencia.
“Se tomarán medidas. Las personas que no cumplieron adecuadamente con sus responsabilidades tendrán que renunciar. Voy a realizar varios cambios en el área de salud en los cargos medios para que el sistema de salud en Durango funcione como debe”, expresó el gobernador del estado.
Esto generó diversas críticas a los métodos del hospital, pues aseguran que el uso de insumos improvisados no solo pone en riesgo la salud de los pacientes, sino que también refleja una falta de planificación y gestión en el sistema de salud local
“Esto no puede suceder, ya estoy investigando a fondo”, añadió también.
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Estas declaraciones han generado diversas críticas a los métodos del hospital, pues aseguran que el uso de insumos improvisados no solo pone en riesgo la salud de los pacientes, sino que también refleja una falta de planificación y gestión en el sistema de salud local.
La ciudadanía ha expresado su indignación a través de las redes sociales, exigiendo explicaciones y responsabilidades por la situación.
Además, ha llamado a los responsables a asumir su responsabilidad y presentar su renuncia si es necesario.
Con información de TV Azteca