A pesar de que el hombre siempre mantuvo su inocencia, fue ejecutado por asesinato y ahora las más recientes pruebas de ADN apuntan a otro culpable.
Se trata de Ledell Lee, quien fue ejecutado en 2017 por el asesinato de Debra Reese, su vecina. Sin embargo, cuatro años después, una nueva prueba de ADN apunta que fue otro el culpable.
Ledell Lee recibió la pena capital luego de que uno de sus vecinos declarara haberlo visto entrar y salir de casa de la víctima: Debra quien fue apaleada hasta la muerte en 1993.
Según el jurado, la foto de una huella de zapato, así como sangre encontrada en el calzado de Ledell comprobaban su culpabilidad, por lo que Ledell fue ejecutado en Estados Unidos, pese a que la defensa siempre alegó que se trataba de evidencia defectuosa, además de que uno de los abogados confesó tener problemas de adicción.
¿Ledell Lee era inocente?
Cuatro años después de ser ejecutado, una prueba de ADN sugiere que el ejecutado con una inyección letal es inocente.
Y es que las muestras tomadas del arma homicida y en una camisa señalan a otra persona, del sexo masculino y desconocida hasta el momento. También se encontraron huellas dactilares en el mango del garrote empleado para apalear a Debra Reese que hasta el momento no han sido identificadas.
Nina Morrison, una las abogadas de Ledell Lee, declaró poco después de la ejecución que durante la investigación nunca se realizó una prueba de ADN del condenado.
“Nadie debería ser ejecutado cuando existe la posibilidad de que esa persona sea inocente” declaró la abogada Nina Morrison.
Familia de Ledell Lee reclama justicia
En 2020, familiares de Ledell Lee demandaron a la ciudad de Jacksonville con el objetivo de que realizaran pruebas de ADN a elementos recolectados en la escena del crimen y de reclamar justicia para Ledell, quien se dijo inocente en todo momento.
“Nos alegramos de que haya nuevas pruebas en la base de datos nacional de ADN y mantenemos la esperanza de que se descubra más información” aseguró la hermana de Ledell Lee, Patricia Young.
Incluso, otro homicidio al que se le había vinculado resultó no ser cierto. Por su parte, el gobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, defendió la ejecución de Lee argumentando que las nuevas pruebas no son “concluyentes”. Y agregó: “el jurado lo declaró culpable basándose en la información que tenían. El jurado siempre toma decisiones difíciles”.