Cancún.- El socio conductor de Uber que fue retenido por taxistas la noche de este jueves en la glorieta de El Ceviche de Cancún ha dado a conocer que presentará una denuncia por los hechos ocurridos ante las autoridades pertinentes y por las amenazas recibidas.

“Me llegó la alerta de viaje en la noche, como a las 9:50 pm, algo así. Y me fui hacia plaza Las Américas, ahí estaba la pareja afuera de Liverpool esperando. Se subieron y en cuanto me arranqué me siguió un taxi polarizado, totalmente negro, no se veía nada para adentro. Nos venía siguiendo, me di cuenta y me seguí. En el Ceviche, yo iba para la Zona Hotelera, pero me di vuelta para ver qué hacía. Me paré, puse las intermitentes, se paró, pero no vi que venían más (taxistas), nada más a él”, relató el conductor amedrentado por los taxistas.

Dijo que dio dos vueltas en El Ceviche porque no sabía qué hacer, pues hay lugares oscuros rumbo a la Zona Hotelera donde lo podían agarrar. Y fue que empezó a llamar al 911.

“Ya en la tercera vuelta se me cerraron tres carros, uno adelante, uno en medio y otro atrás y ya no me pude mover. Del carro de adelante se bajó un tipo delgado, me pegó en la ventanilla muy fuerte, pensé que la iba a romper. Y me decía ‘bájate, hijo de tu pinche madre’ y en ese preciso momento vi que había una patrulla enfrente de mi carro y de su carro. Abrí la puerta, me bajé y le grité a la Policía”, agregó.

Como los taxistas se dieron cuenta que había una patrulla con policías, se alejaron un poco del socio conductor de Uber.

Y dijo que ahí empezaron a gritar que Uber no está permitido, que no era legal y pasó mucho de lo que ya se sabe gracias a los videos que grabó otro socio conductor de la plataforma.

“Y le dije si es ilegal o no ¿tú quién eres? Se bajó el policía y ya le dijo ‘cálmese porque me lo voy a llevar”. Y estaban alegando que estaba prohibido cargar gente y más”, relató.

ASUSTARON A LOS TURISTAS

Comentó además que los pasajeros se alteraron demasiado, incluso la mujer comenzó a gritar, y es que los taxistas a fuerza se los querían llevar en una de sus unidades.

Destacó que llegó un grupo de Fuerzas Especiales, que les dijo a los taxistas que se los iba a llevar porque lo que ellos hacían era lo que estaba mal, no lo que hacía el conductor de Uber. Y agregó que un sujeto lo amenazó y le dijo que le diera gracias a dios de que llegaron los policías. Este hombre no iba con el uniforme de los taxistas. Y añadió que no pasaron de las amenazas gracias a que llegó la Policía.

No se detuvo a nadie porque los policías le preguntaron si iba a presentar cargos y él decidió no hacerlo, entonces dejaron ir a los taxistas y solo pidió que una patrulla lo escoltara por un tiempo.

Lamentó el proceder de los taxistas que dice “actúan como secuestradores, con los vidrios polarizados”, y parece que el amparo sirve de poco ante las agresiones de taxistas. “Pensé que me iban a llevar”.

El socio conductor confirmó que acudiría a interponer una denuncia.

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“Voy a ir a la Fiscalía y a denunciar los hechos y por las amenazas de este señor que tomó las placas de mi carro porque no sé qué pueda pasar”, indicó. Y dijo que preguntará a su abogado si conviene o no también denunciar ante el Sindicato de Taxistas, que siempre se lava las manos en estos incidentes, diciendo que nunca recibe quejas y que no puede hacer nada.

Sobre si pese a esta experiencia seguirá como conductor de Uber, dijo que sí, porque además acaba de sacar su carro y necesita pagarlo.