Cancún.- La crisis originada por la pandemia del COVID-19 también es resentida en las finanzas del Ayuntamiento de Benito Juárez, según aseguró su tesorero Marcelo José Guzmán.

El funcionario municipal indicó que, debido al impacto económico generalizado, de desde abril pasado hay un rezago en la recaudación de impuestos de al menos un 85 por ciento, que a finales de año se traducirá a unos 850 millones de pesos menos.

Aclaró también que para subsanar esta situación han tenido que aplicar reducciones y hacer ajustes en los presupuestos para poder cubrir los pagos de nómina, impuestos federales y a proveedores.

José Guzmán también reveló que dicho rezago es de consideración, tomando en cuenta que en el municipio la recaudación proviene de forma directa del contribuyente en un 65 por ciento y el resto de las aportaciones federales.

Finalmente, sobre el pago del predial, el funcionario señaló que entre el 60 y 70 por ciento de la meta a recaudar, que es de 650 millones de pesos, se obtuvo a finales del año pasado con la puesta en marcha de estímulos fiscales y que el resto es el que se va recaudando durante el presente ejercicio fiscal 2020.