Una tragedia familiar ocurrió en el condado de Shelby, Alabama, cuando un bebé de tres meses fue atacado por el perro lobo que tenían como mascota. El pequeño fue llevado al hospital, pero no sobrevivió a las heridas causadas por el animal, que fue sacrificado por las autoridades.

Según informó NBC News, el hecho ocurrió el pasado martes en el área de County Road 440, donde la Oficina del Sheriff del condado recibió una llamada de emergencia. Al lugar acudieron agentes de la policía, los bomberos y de control de animales.

El veterinario que examinó al perro lobo confirmó que se trataba de un híbrido entre un lobo y un perro doméstico, un tipo de animal que puede tener un comportamiento impredecible y territorial, según el Centro Internacional del Lobo.

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La oficina del sheriff está investigando el caso como un posible caso de abuso, negligencia o explotación de menores y adultos vulnerables, según NBC News.

Los expertos advierten que tener a un lobo como mascota no es recomendable, pues implica una enorme responsabilidad y también un riesgo, pues consideran que, actualmente es un sinsentido pretender, aunque sea cierto que bajo determinadas circunstancias sería posible que fuera así.

El ser humano disfrutó del lobo como mascota en un periodo de su existencia, cuando era un compañero de caza, guardián, protector y amigo. Sin embargo, actualmente la humanidad ya no es una sociedad cazadora-recolectora y no necesitamos que un lobo nos acompañe a un supermercado a comprar el pan.

Con información de Excélsior