Un video que muestra un caso de violación a la privacidad en una tienda departamental de Bogotá se ha viralizado en redes sociales, generando indignación y debate sobre la protección de la intimidad en espacios públicos. En el material, una mujer denuncia que un hombre la grabó sin su consentimiento mientras se encontraba en los probadores del establecimiento.
#DEPRAVADO. Un sujeto fue sorprendido grabando con su celular a una joven que se encontraba en un probador de ropa de reconocida marca en centro comercial de Bogotá.
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— Colombia Oscura (@ColombiaOscura_) March 2, 2025
Según relató la afectada, ella estaba probándose un pantalón cuando notó un celular colocado en el suelo, apuntando hacia su vestidor. La grabación ya llevaba aproximadamente 44 segundos, lo que la llevó a salir de inmediato para confrontar al responsable. Al salir, descubrió que el hombre estaba acompañado por dos mujeres y dos hombres, quienes intentaron justificar la acción argumentando que grabar no es ilegal. En el video difundido, se observa cómo el hombre guarda el celular y se retira sin eliminar el contenido grabado.
Una de las mujeres que acompañaba al sujeto intentó impedir que la afectada los siguiera, burlándose de la situación al lanzar un beso a la cámara y hacer gestos como si se tomara selfies. “¿Para el Face o para el TikTok? Porque a mí me encanta”, comentó de manera sarcástica.
El caso ha generado un debate sobre las implicaciones legales de este tipo de conductas. De acuerdo con el Código Penal de Colombia, el artículo 192 establece que es ilegal captar, interceptar o grabar comunicaciones privadas sin autorización, considerándose una violación al derecho a la intimidad que puede acarrear sanciones penales. Además, el artículo 5 de la misma normativa protege los datos sensibles, definidos como aquellos que afectan la intimidad del titular o cuyo uso indebido puede generar discriminación.
Sin embargo, no existe un apartado específico en la legislación colombiana para casos como este. En contraste, en México, la Ley Olimpia contempla sanciones de tres a seis años de prisión y multas económicas por grabar, difundir o compartir contenido íntimo sin consentimiento, lo que subraya la necesidad de fortalecer las leyes en Colombia para abordar estas situaciones.
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El incidente ha reavivado la discusión sobre la importancia de garantizar espacios seguros para las mujeres y la urgencia de implementar medidas legales más estrictas para proteger la privacidad y la dignidad de las personas. Sin duda se trata de un caso que generó indignación y del que espera las autoridades tomen conciencia para evitar que se repitan situaciones como estas.
Con información de El Heraldo de México