Mérida, Yucatán.- Un presunto vendedor de loros fue detenido por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública y entregado a la Procuraduría General de la República (PGR), luego que ofreciera tres ejemplares polluelos (Pistácidos) en la Macroplaza.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) detectó el acuerdo que realizó el vendedor y el comprador a través de las redes sociales, y do aviso a las autoridades locales.
El ahora detenido no acreditó la legal procedencia del animal, con fundamento en los artículos 114 y 119 fracción I de la Ley General de Vida Silvestre (LGVS).
Asimismo, en la inspección, se aseguró el vehículo en el que se encontraba la caja de cartón que contenía los polluelos de pistácidos, y se realizó la presentación, ante la Procuraduría General de la República (PGR), de la persona que ofertaba dichos ejemplares, presunto comerciante ilegal de vida silvestre.
PROHIBICIÓN
Desde el año 2008, la LGVS establece, expresamente, la prohibición del aprovechamiento extractivo con fines de subsistencia o comerciales de aves de la familia Psitacidae o Psitácidos de distribución natural en el territorio nacional.
Los ejemplares de vida silvestre asegurados se encuentran en la Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre “Parque Zoológico del Bicentenario Animaya”, ubicado en Mérida, Yucatán.
El poseer ejemplares de vida silvestre sin demostrar su legal procedencia se sanciona de acuerdo a lo establecido en la LGVS con una multa que va de 50 a 50 mil Unidades de Medida y Actualización (UMAs); asimismo, el Código Penal Federal establece una pena de prisión de 1 a 9 años para el tráfico ilegal de vida silvestre de endémicas, amenazadas, en peligro de extinción o sujetas a protección especial.