El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, celebró públicamente la cancelación de una ceremonia en la academia militar de West Point que tenía previsto rendir homenaje al actor Tom Hanks con un reconocimiento especial.
El evento, que se realizaría en el marco de las actividades conmemorativas de la academia militar de West Point, fue suspendido después de que algunos sectores militares y políticos consideraran que el Tom Hanks representaba una figura “destructiva y woke” (que es una postura política diferente; el actor se ha expresado a favor de los migrantes).
A través de su red social Truth Social, Donald Trump escribió: “¡Una medida importante! ¡No necesitamos que personas destructivas y WOKE reciban nuestros preciados Premios Americanos!”.
El comentario rápidamente se viralizó entre los seguidores de Donald Trump, quienes aplaudieron la firmeza contra lo que el mandatario considera la agenda progresista que ha perreado en espacios culturales, académicos y militares.
La cancelación del homenaje en la academia militar de West Point generó un amplio debate en medios de comunicación y redes sociales.
Mientras que simpatizantes de Donald Trump defendieron la decisión de la academia militar de West Point, acusando a Tom Hanks de representar a un sector de Hollywood alineado con “valores progresistas contrarios a la tradición estadounidense”, críticos y millones de personas señalaron que se trataba de un ataque innecesario contra un actor que a lo largo de su carrera ha sido reconocido no solo por su talento, sino también por su apoyo a causas humanitarias.
DEBATE POLÍTICO Y CULTURAL
La figura de Tom Hanks —ganador de dos premios Oscar y protagonista de cintas emblemáticas como “Forrest Gump”, “Náufrago” y “Rescatando al Soldado Ryan”—, ha sido vista durante décadas como un símbolo de integridad y compromiso cívico.
Sin embargo, en los últimos años ha expresado posturas que algunos sectores conservadores califican de “woke”, entre ellas su apoyo a movimientos por la justicia racial, la defensa de los derechos de minorías y su crítica al revisionismo histórico en Estados Unidos.
El debate alcanzó un tono más intenso cuando se filtró que en la ceremonia de la academia militar de West Point se pretendía reconocer a Tom Hanks con un galardón simbólico por su contribución al cine bélico y a la representación del sacrificio militar en producciones que han inspirado a varias generaciones de cadetes.
RAZONES DETRÁS DE LA CANCELACIÓN
La presión de grupos conservadores y el respaldo abierto de Donald Trump llevaron a la academia a reconsiderar la entrega. De acuerdo con fuentes internas, la decisión de cancelar la ceremonia se basó en la percepción de que Tom Hanks representa una influencia “divisiva y destructiva”, en particular por sus críticas hacia políticas migratorias pasadas y su insistencia en abordar temas como la discriminación racial en el ámbito militar.
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La academia militar de West Point argumentó que, si bien respeta la trayectoria artística de Tom Hanks, debe cuidar que sus reconocimientos no se interpreten como una alineación con posturas políticas que podrían afectar la cohesión y disciplina dentro de sus filas.
Bajo esa lógica, se determinó que homenajear a Tom Hanks enviaría un mensaje equivocado a los cadetes y al público, reforzando una narrativa cultural que consideran ajena a los valores tradicionales de la institución.
