Un presunto caso de negligencia en Kenia, África, donde murieron ocho rinocerontes negros le está dando la vuelta al mundo.
Lo anterior, debido a que se trata de una especie en peligro de extinción.
Kenia ha recibido duras críticas por parte de diferentes organismos ambientalistas, dado que el país concentra al 80% de la población de estos animales, y peor aún, porque el pasado marzo murió, ahí, el último rinoceronte blanco del planeta.
Al momento, se sabe que 14 los rinocerontes estaban siendo trasladados a una zona más segura para su protección y monitoreo, y que tras el deceso frenaron la misión.
También te puede interesar: Cuidado ambiental y animal, este fin de semana en Playa del Carmen
Los responsables se han negado a rendir declaraciones y en consecuencia, le han prohibido a su personal hablar con los medios de comunicación.
Sin embargo, fuentes anónimas declararon que al menos ocho de estos mamíferos trasladados al nuevo sitio, se intoxicaron por beber agua contaminada.