La Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguró que la vacuna contra COVID-19 de AstraZeneca debe continuar administrándose pues los beneficios superan sus riesgos y que respalda la inyección.
Tras la suspensión temporal de la vacuna de AstraZeneca en vario pauses, un grupo de expertos de la OMS está evaluando los datos de seguridad más recientes y comunicará los hallazgos una vez que se complete la revisión, dijo la organización a través de un comunicado publicado este miércoles.
Y es que los informes de coágulos de sangre (trombosis) en algunas personas que recibieron las inyecciones de Astra llevaron a más de una docena de países de la Unión Europea a pausar su aplicación, arriesgándose a otra desaceleración en el impulso de vacunación del bloque.
La Agencia Europea de Medicamentos debe proporcionar una evaluación definitiva el jueves. Italia y Francia han indicado que levantarían las suspensiones si se considera seguro. Mientras que funcionarios de la OMS indicaron el lunes que los datos preliminares no muestran una asociación entre los coágulos de sangre y la vacuna.
“Ningún fármaco o vacuna podría ser 100 por ciento seguro”, detalló el lunes Soumya Swaminathan, científico jefe de la OMS.
Señalan que los coágulos de sangre ocurren con frecuencia independientemente: son la tercera enfermedad cardiovascular más común a nivel mundial, según la OMS.
“Podrías tener algo que suceda uno en un millón. Pero luego hay que ver cuál es el beneficio de proteger a las personas contra una enfermedad que está matando a millones de personas frente a los riesgos potenciales”.