Durante muchos años, las flores se han utilizado por la medicina tradicional mexicana en forma de té para el tratamiento de la tos y diversos problemas respiratorios, y es el caso de la bugambilia que, además de sus colores, también tiene diversos usos culinarios.
Otra especie de bugambilia (con flores de diferentes colores) posee propiedades importantes como insecticida, de acuerdo con la Sociedad Botánica de México.
Este arbusto espinoso o árbol es nativo de Sudamérica, sobre todo de Brasil y Perú. Actualmente se cultiva como planta ornamental en varias regiones subtropicales y tropicales del mundo.
Las propiedades curativas de la bugambilia se concentran en sus flores. Desde las culturas antiguas se les consideran como medicinales gracias a su efectividad para combatir malestares.
En una publicación en las redes sociales de Divulgación de la Ciencia, en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), se menciona que la infusión tiene propiedades asépticas que ayudan a prevenir problemas en la piel, principalmente el acné.
En algunas regiones se utiliza para curar, desinfectar y tratar heridas en la piel, pues posee propiedades cicatrizantes y antisépticas. En este caso, se remoja un trapo con agua de bugambilia para después colocarlo unos minutos sobre las zonas afectadas.
Asimismo, ofrece beneficios para el sistema digestivo debido a sus propiedades antibacterianas y antidiarreicas, que actúan en el combate a la indigestión y reducen los síntomas de acidez estomacal.
Finalmente, la flor se recomienda en infusiones para personas con diabetes porque sus hojas tienen efectos hipoglucémicos que ayudan a reducir los niveles de azúcar en la sangre.
Como té tiene propiedades expectorantes: favorece al sistema respiratorio, tratando padecimientos como resfriados, bronquitis, gripe, asma y tos. Además, optimiza el funcionamiento de los pulmones y mejora la capacidad de oxigenación del cuerpo.
También ayuda a aliviar síntomas como la fiebre y dolores de estómago. Incluso se llega a combinar con orégano o tomillo por la noción de que se potencian sus resultados.
Puede ser una opción refrescante: hay diferentes recetas de agua de bugambilia (siempre con pétalos color magenta o lila), algunas utilizan jugo de limón para mejorar el sabor de la bebida, con azúcar al gusto.
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El procedimiento de preparación empieza al lavar bien los pétalos y retire las partes amarillas o blancas.; hiérvalos con agua por cinco minutos hasta que suelten su color y esencia. El líquido debe tornarse de un color rosa intenso. Deje reposar.
En una jarra, mezcle agua con azúcar al gusto; añada el extracto de bugambilia colado; agregue jugo de limón con moderación para no opacar el sabor de la flor; sirva con hielo y decore con flores frescas.
