Joe Biden presumió la llegada de sus dos perros cuando se mudó a la Casa Blanca, sin embargo el gusto le ha durado muy poco. Y es que estos canes mordieron al prsonal de seguridad de la residencia del presidente norteamericano. Por lo que ya se los han llevado de regreso a Delaware, estado donde vivía el demócrata antes de llegar a Washington.
Esto se debe a que Major, uno de los dos pastores alemanes parte e la familia de Joe Biden, mordió a un miembro de la seguridad de la Casa Blanca la semana pasada.
No se sabe a ciencia cierta el estado de salud de la víctima, pero el episodio fue lo suficientemente grave como para trasladar a Major y al otro perro, Champ, a Wilmingto, Delaware.
Major, de 3 años, es el más joven de los dos pastores alemanes y a veces se le ha visto con un comportamiento agitado, ladrando, saltando y “embistiendo” al personal y los miembros de seguridad de la mansión presidencial, dijeron las fuentes a medios como CNN. Mientras que Champ es más grabnde, tiene 13 años de edad y su comportamiento es más calmado en general.
Este día se cuestionó a la vocera de la Casa Blanca sobre el incidente; dijo que tenía información sobre el caso aunque remacó que “Major y Champ son parte de la familia Biden”.
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Cabe recordar que antes de la investidura de Joe Biden como presidente, el pasado 20 de enero, la pareja anunció que se mudaría a la Casa Blanca junto a sus perros y que traerían un gato también.
Por ahora parece que los canes no se adaptaron del todo al cambio en Washigton y ahora permanecerán en Delaware, en la residencia de los Biden, quizá de manera temporal.