A raíz de la emergencia sanitaria por el coronavirus, el sector inmobiliario sufrió una contracción que es aprovechada por inversionistas que buscan este tipo de oportunidades.
Remate de propiedades, oportunidad de unos cuantos
De acuerdo con Pedro Frank Martínez, ex presidente de la Sección Inmobiliaria de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco Servytur) y director ejecutivo de la desarrolladora Mi Casita Playa señaló que “este mercado está un poco trastocado por temas de la pandemia, sobretodo en la cuestión de rentas que ajustamos los precios, se contrajeron para ser lucrativos, pero no hay demanda como antes, hay poca gente”.
Recordó que Playa del Carmen depende del turismo y al cerrarse la actividad por esta situación, los arrendamientos a corto y largo plazo se paralizaron.
Las personas que vivían aquí se fueron a otras partes del país, a sus lugares de origen, en donde tienen más posibilidades de empleo. “Aquí, no tenemos (trabajo), estamos parados”, dijo.
Aunque, aclaró, en los últimos días han notado cierto movimiento que podría ser un repunte.
Donde sí hay un mejor movimiento, es en el tema de las compras. Al respecto, el líder inmobiliario explicó que las ventas se dan porque los propietarios quieren deshacerse del producto (las viviendas), y hay oferta de precios que hace que existan los inversionistas que ganan dinero en épocas de crisis, como la actual.
“Hay compra, no a los precios que vendía un desarrollador; ha tenido que poner el dólar a un precio más atractivo y eso hace que haya personas que están comprando para tener esa ventaja que da el mercado”, explicó.
Son los propietarios quienes ponen estos precios de remate que algunos están aprovechando. En el caso de las rentas, concluyó el especialista, éstas cayeron un 25 por ciento, aproximadamente.