Un albañil utilizó sus conocimientos para construir un túnel hasta la casa de su amada. Todo iba bien, hasta que el esposo de ella salió temprano de trabajar y los “cachó en la movida”.
Este hombre enamorado y culpable de Tijuana, Baja California fue identificado como Alberto, y construyó el pasadizo secreto al puro estilo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, pero a diferencia de él no fue para escapar, sino para entrar a una casa y visitar a vecina llamada Pamela, con quien sostenía un amorío.
Los hechos se dieron en la colonia Villas del Prado, en Tijuana, Baja California, donde el hombre construyó durante varias semanas el túnel del amor entre su casa y la de su amante.
El plan de Alberto era visitar a Pamela sin levantar sospechas tanto de los vecinos como de sus parejas, ya que ambos vivían con otras personas. Fue así como poco a poco fue avanzando debajo de la tierra, como lo hizo “El Chapo” Guzmán para fugarse de las cárceles o traficar droga, hasta que logró su meta y llegó a la casa de Pamela.
Según los medios tijuanense, Alberto y Pamela estaban en pleno “acto pasional” cuando Jorge, el esposo, los sorprendió, pese a los esfuerzos para que la historia de amor siguiera viva.
Y aunque él intentó esconderse debajo de la cama, el esposo se dispuso a buscarlo, el hombre ya no estaba y en su lugar encontró un túnel que finalizaba en la casa del amante.
Jorge también entró al túnel y cuando llegó a la otra casa encontró a Alberto quien, según los medios fronterizos, “le suplicó que no hiciera ruido porque su esposa estaba dormida en la habitación”.