Carabobo.- Al menos 68 personas murieron el miércoles en el calabozo de la comandancia de la policía de Valencia, en Carabobo, al norte de Venezuela.

Intento de motín en calabozo

El incendio se produjo luego de un intento de motín; así lo confirmó Tarek William Saab, fiscal general de Venezuela; quien confirmó la cifra de fallecidos la noche del miércoles.

Saab confirmó que la mayoría de los muertos eran presos, pero que al menos dos mujeres que se encontraban de visita para ver a sus familiares, también se encuentran entre los fallecidos.

A pesar de esto, algunos medios locales revelaron una cifra mayor de fallecidos, aunque esto no ha sido confirmado oficialmente.

Lo que sí se pudo confirmar, fue que la mayor parte de las víctimas murió por asfixia.

Familias, en incertidumbre y desesperación

Después de que la noticia se dio a conocer, una gran cantidad de personas se reunión afuera del calabozo, para conocer la situación de sus familiares detenidos.

Como la comandancia se negó a dar mayores explicaciones, comenzaron las protestas, por lo que la policía intentó dispersar a los manifestantes con gas lacrimógeno.

Los familiares de los detenidos acudieron frente a la estación de policía para saber qué ocurrió con sus allegados. Algunos no saben si están vivos o muertos.

Por otra parte, el secretario de gobierno de Carabobo dijo que las autoridades brindarán apoyo a los familiares con los servicios funerarios y la posterior sepultura de los internos fallecidos, así como atención psicológica a los familiares de las víctimas.

Algo común

Cabe señalar que la situación en estos centros de reclusión ha sido denunciada en múltiples ocasiones, el hacinamiento es algo común en el país sudamericano.

Según un activista, existen 45 mil personas en los calabozos de Venezuela en esas condiciones de hacinamiento, en aproximadamente 500 centros en todo el país.

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Se maneja que existen más de 200 reclusos en un espacio para 40, ya que los centros de detención no cuentan con la infraestructura para que una persona cumpla una pena larga en prisión, o un arresto prolongado.